Ep 182 | El Biofilm

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¿Tu acuario tiene una capa blanquecina en la superficie? La solución es más fácil de lo que crees

¡Muy buenas! Hoy quiero hablarte de un tema que a menudo pasa desapercibido pero que es fundamental para la salud y la belleza de tu acuario. ¿Alguna vez has notado una especie de capa blanquecina o translúcida flotando en la superficie del agua? Si la respuesta es sí, quédate, porque te voy a contar por qué aparece y cómo un pequeño accesorio puede marcar una diferencia brutal.

A lo largo de los más de 180 podcasts que he grabado, he intentado resolver todo tipo de dudas, desde las más complejas hasta las que parecen más sencillas. Y esta, la de la capa superficial, es una de las que más impacto tiene en el día a día de un acuario plantado, aunque muchos no le den la importancia que merece. Vamos a ver por qué es un problema y, lo más importante, cómo solucionarlo de una vez por todas.

¿Qué es esa capa y por qué debería preocuparte?

Esa película que ves en la superficie, a menudo de aspecto lechoso o aceitoso, se conoce como biofilm. No es más que una acumulación de bacterias, proteínas y otros residuos orgánicos que, por la tensión superficial del agua, se quedan flotando. A primera vista, puede parecer solo un problema estético, pero sus consecuencias van mucho más allá.

El principal inconveniente del biofilm es que actúa como una barrera que tamiza la luz. Piensa en toda la inversión que has hecho en una buena pantalla de iluminación para que tus plantas crezcan sanas y frondosas. Pues bien, esta capa es como si pusieras un plástico semitransparente sobre el acuario, reduciendo la cantidad y la calidad de la luz que llega a las plantas.

¿Y qué ocurre cuando las plantas no reciben suficiente luz? Empiezan los problemas en cadena.

• Se espigan: Crecen más altas y débiles, buscando desesperadamente la luz, en lugar de desarrollarse compactas y robustas.
• Pierden color: Esas plantas de tonos rojizos que tanto te gustan se volverán más pálidas y menos vistosas.
• Absorben menos nutrientes: Si la fotosíntesis se ve limitada por la falta de luz, las plantas consumirán menos abono del que les proporcionas. Ese exceso de nutrientes que queda en el agua puede acabar alimentando a las algas, creando un nuevo problema.

Es un efecto dominó: una cosa lleva a la otra y, lo que empezó como una simple capa en la superficie, acaba afectando al equilibrio de todo el ecosistema.

La herramienta definitiva: el aspirador de superficie o skimmer

Entonces, ¿cómo eliminamos este biofilm de forma eficaz? Podrías intentar quitarlo manualmente con una servilleta de papel, pero te darás cuenta de que a las pocas horas vuelve a aparecer. Estás atacando el síntoma, no la causa. La solución real y definitiva es instalar un aspirador de superficie, también conocido como skimmer.

Este aparato es básicamente un pequeño filtro que se dedica exclusivamente a absorber el agua de la capa más superficial del acuario. Al hacerlo, se lleva consigo toda la suciedad, partículas y, por supuesto, el biofilm, devolviendo al acuario un agua limpia y cristalina. El resultado es una superficie totalmente transparente que permite que la luz penetre sin obstáculos.

Un consejo importante a la hora de elegir uno es fijarte en la salida del agua. Te recomiendo que escojas un modelo que expulse el agua de forma horizontal. Algunos modelos la expulsan verticalmente hacia abajo, lo que puede crear un socavón en tu sustrato y removerlo, algo que estéticamente no queda nada bien.

Consejos prácticos para usar tu skimmer

Integrar un skimmer en tu acuario es muy sencillo, pero hay un par de detalles que debes tener en cuenta para sacarle el máximo partido.

Primero, su mantenimiento. El skimmer tiene una pequeña esponja en su interior que es la que retiene toda la suciedad que recoge. Es fundamental limpiar esta esponja cada tres o cuatro días. Es una tarea que no te llevará más de 30 segundos: lo desmontas, enjuagas la esponja con agua del propio acuario y lo vuelves a montar. Si la esponja se obstruye, dejará de absorber agua y el skimmer perderá toda su eficacia.

Segundo, la alimentación de los peces. Evita echar la comida justo en la zona donde está el skimmer. Si usas comida en escamas o cualquier otro alimento que flote, el skimmer lo aspirará antes de que los peces tengan tiempo de comérselo. Simplemente, aliméntalos en el extremo opuesto del acuario.

Yo personalmente instalo un skimmer en todos los acuarios que monto a partir de 60 litros. Es un accesorio que no solo mejora la salud del acuario plantado, sino que aporta un extra de limpieza y claridad que se nota muchísimo a nivel visual. Una superficie brillante y en constante movimiento es mucho más atractiva.

En definitiva

Si quieres llevar tu acuario al siguiente nivel, no subestimes la importancia de una superficie limpia.

• La capa blanquecina (biofilm) que se forma en la superficie no es solo un problema estético; reduce la luz que llega a tus plantas.
• Esta falta de luz provoca que las plantas crezcan débiles, pierdan color y no aprovechen bien los nutrientes, lo que puede desencadenar la aparición de algas.
• La solución más eficaz y permanente es instalar un aspirador de superficie o skimmer, que elimina continuamente esta capa.
• Elige un modelo con salida de agua horizontal para no remover el sustrato y recuerda limpiar su esponja cada pocos días para que funcione correctamente.
• Tener una superficie cristalina no solo beneficia a tus plantas, sino que mejora enormemente la estética general de tu acuario.

Espero que este consejo te sea de gran ayuda. Si necesitas cualquier cosa para tu acuario, en Nascapers estaremos encantados de enviártelo a casa. ¡Un fuerte abrazo y a disfrutar de ese acuario!